RABANERA

Rabanera es un municipio que pertenece a la comarca de Cameros, en la Rioja Media, y, en concreto, a la comarca del Camero Viejo. Se encuentra a 12 km al noreste de Laguna de Cameros, cabecera comarcal, y a 43 km al sur de Logroño, capital de la provincia homónima y de la Comunidad Autónoma de La Rioja. Su población es de 28 habitantes (INE, 2017).

Rabanera se encuentra en pleno corazón del Camero Viejo, sierra delimitada por los valles del Iregua al oeste y del Jubera – Cidacos al este. Rabanera descansa a orillas del río homónimo, en su margen derecha, en una de las zonas más frondosas del Camero Viejo, el cual, a diferencia de lo que sucede en el Nuevo, presenta en determinados sectores importantes tramos de monte desnudo. A su alrededor pueden verse laderas convenientemente aterrazadas, algunas hoy ya baldías, pero lo cierto es que la nota dominante es la de una interminable y sinuosa sierra cubierta por el follaje de sus bosques.

HISTORIA

Poco se sabe de los orígenes del poblamiento de Rabanera, villa denominada en la documentación histórica como Rabanera de Cameros e, incluso, Ravanera. La primera referencia escrita sobre la localidad data de 1366, dentro de la donación que Enrique II hizo a su consejero y ayudante Juan Ramírez de Arellano en 1366. Tal donación correspondía en realidad al señorío de Cameros, del cual Rabanera formaría parte durante varios siglos, y del que solo unas pocas villas de la comarca pudieron escapar, si bien lo hicieron para formar parte de otros dominios señoriales. El rey castellano, con la donación, pretendía corresponder a la ayuda prestada por Juan Ramírez de Arellano durante la guerra civil mantenida con el hermano del rey, Pedro I el Cruel, cuya derrota implicó el ascenso al trono de la Casa de Trastámara. Del linaje de este noble caballero nacerían los futuros condes de Aguilar, así condecorados en el siglo XV por los Reyes Católicos, sin duda la familia noble más destacada y poderosa de La Rioja. Eso se debió a la riqueza sin parangón en la comunidad que durante tres siglos monopolizó la sierra riojana gracias a la ganadería trashumante y mesteña y a la industria de la lana aparejada a la cría del ganado ovino. Así, como tantas otras villas del Camero, Rabanera conoció su esplendor durante el siglo XVIII de la mano de ambas dedicaciones.

FESTEJOS POPULARES

• Fiestas patronales en honor a los Santos Mártires Primo y Feliciano: fin de semana anterior al 9 de junio.
• Fiestas de Acción de Gracias: fiestas grandes de Rabanera, se celebran el tercer fin de semana del mes de agosto.

ACTIVIDADES

Rabanera es hoy un pueblo poco bullicioso y tranquilo en el que apenas viven más de 30 personas pero que, sin embargo, esconde algo que cualquier ojo perspicaz logra entender al momento. Se trata de su sencilla majestuosidad rural, con sus calles empedradas y sus casonas de piedra, tan típicas de la sierra camerana, una arquitectura popular que enamora a golpe de vista a quienes huyen de la ciudad buscando un remanso de paz. Este bonito aire señorial de la villa se debe, como ya podrá imaginarse, a la importante actividad ganadera y lanera que vivió la villa hasta la llegada de la industrialización y la extinción de la Mesta en el siglo XIX. Sobre el coqueto casco urbano de Rabanera otea la iglesia parroquial de la Asunción, construida en el siglo XVI en mampostería y sillarejo sobre el saliente más elevado de la villa.

De su entorno destacan las continuas cimas redondeadas del Camero Viejo y los bosques que visten sus laderas, donde podemos encontrar desde pinos y robles hasta hayas en las zonas más umbrías, así como numerosos animales, incluso ciervos, paciendo tranquilamente por los pastizales. Dentro de los recorridos menores destacan las propuestas senderistas adecuadas también como rutas BTT que conducen hasta las ruinas del monasterio de San Simeón del Monte, hasta la Laguna Grande, las cimas de Fuentecillas o Peña Untura o hasta villas vecinas como Ajamil, Laguna de Cameros o San Román de Cameros. Además, desde Rabanera es posible acceder, especialmente para aquellos que desean practicar el cicloturismo, al sendero de Gran Recorrido 93, que recorre toda la sierra riojana y que conecta con múltiples senderos más, como por ejemplo la Vía Romana del Iregua, ya en el Camero Nuevo. Para los amantes de la naturaleza, el Parque Natural Sierra de Cebollera es único en toda La Rioja y se encuentra a poco más de 30 km.

GASTRONOMÍA

Destacan las carnes a la brasa, especialmente el cabrito asado, plato típico de la Tierra de Cameros, los frutos de las huertas familiares y el queso camerano.